En el día del advenimiento del Señor Balarama, Giriraj Swami inició a Bhakta Shawn en la familia espiritual de Srila Prabhupada, dándole el nombre de Shyama Chandra Dasa. En casa de Bhrigupati Prabhu y madre Chandravali tuvo lugar una dulce e íntima ceremonia, en la que hablaron Giriraj Swami, Rtadhvaja Swami y Bhrigupati Prabhu.
“Ahora hemos llegado a esta etapa, que ha tomado varios años. Han habido muchas pruebas y tribulaciones a lo largo del camino, y se han aprendido muchas lecciones. A veces, las lecciones aprendidas con gran dificultad son más permanentes. Y el prerequisito para progresar en la vida espiritual es la realización, o la convicción, de que no existe verdadera felicidad en el mundo material, y que el único refugio es Krishna y Su Santo Nombre. Mientras pensemos que este objeto material o aquella situación material nos hará felices, es como la décima ofensa: no tener plena fe en el canto del Santo Nombre y mantener apegos materiales. Pero se puede progresar cuando se llega a la conclusion de que ‘nada puede hacerme feliz en el mundo material’, y que ‘aunque algo me haga un poco feliz durante un tiempo, no durará y no me satisfará del todo’. Ya has llegado a esa conclusión, y esa convicción creará la conciencia apropiada para seguir avanzando”. — Giriraj Swami