Hoy se conmemora Sri Rama-vijaya-Dasami (Dasara), el día en que el Señor Ramachandra venció al poderoso tirano Ravana. Como se narra en el Srimad-Bhagavatam (2.7.25):
vaksah-sthala-sparsa-rugna-mahendra-vaha-
dantair vidambita-kakubjusa udha-hasam
sadyo ’subhih saha vinesyati dara-hartur
visphurjitair dhanusa uccarato ’dhisainye
“Cuando Ravana estaba combatiendo en la batalla, la trompa del elefante que llevaba al Rey del cielo, Indra, se rompió en pedazos al chocar con el pecho de Ravana, y las partes rotas esparcidas iluminaron todas las direcciones. Por consiguiente, Ravana se sintió orgulloso de su fuerza, y comenzó a pasearse entre los soldados que combatían, creyéndose el conquistador de todas las direcciones. Pero su risa, dominada por el júbilo, juntamente con su propio aire vital, cesó repentinamente ante el zumbante sonido del arco de Ramacandra, la Personalidad de Dios.”
Srila Prabhupada comenta: “Por poderosa que una entidad viviente sea, cuando Dios la condena nadie puede salvarla, y, del mismo modo, por débil que sea, cuando el Señor la protege nadie puede aniquilarla”.
Ravana es la personificación de la lujuria —y la envidia—, las cuales pueden perturbar la ejecución del servicio devocional puro.
Que el Señor Sri Ramachandra nos proteja a todos.
—Giriraj Swami